Después de ver los tipos de inversiones financieras, otra clasificación puede ser según sean los pagos y los cobros. Esta clasificación en base a cobros y pagos que para el lector puede parecer elemental, comprobará mas adelante que tiene una gran importancia, pues el rendimiento de una inversión puede variar ostensiblemente si esta se hace al contado, a plazos, por leasing…
Atendiendo a los flujos monetarios podemos clasificar una inversión de la siguiente manera:
a) Inversión de un solo pago – Un retorno en cobro. (Un pago – Un cobro)
Este tipo de inversiones suelen ser a muy corto plazo, de tipo financiero (inversión en deuda pública debido a un exceso de tesorería) o bien inversiones de alto riesgo, por lo que el inversor querrá recuperar lo invertido lo antes posible.
b) Inversiones en un solo pago – Varios retornos en varios cobros. (Un pago – Varios cobros)
Este tipo de inversiones es la más usual que nos encontramos, en las cuales el inversor realiza el desembolso de la inversión en su totalidad al principio, es decir al inicio de comenzar a funcionar con los activos adquiridos, y que va recuperando mediante flujos de superhabit durante la vida útil de estos (ejemplo: la adquisición de una grúa para unas determinadas obras de construcción).
c) Varios pagos – varios cobros
Con el tiempo este tipo de inversiones se a convertido en las más comunes, ya que debido unas veces a la falta de liquidez de la empresa para adquirirlas, otras para utilizar la capacidad de endeudamiento de la empresa tiene, reservandos su liquidez para la gestión de su circulante (ejemplo: adquisición a plazos de maquinaria, comprar por leasing de una nave).