El punto de equilibrio, se denominada así a aquel volumen de actividad en el cual el beneficio es nulo, dicho de otra forma, la empresa para dicho volumen de actividad no pierde ni gana dinero, es decir no tiene beneficio ni pérdida, lo que nos indica los ingresos igualan a los gastos. Así pues en este punto:
Ingresos = Gastos fijos + gastos variables
O bien:
Beneficio = 0 = Ingresos – Gastos fijos – Gastos variables
Diremos que el precio de venta de un producto, una parte tiene que cubrir los costes variables, que son los que tuvieron lugar por producir o comprar precisamente ese producto, y el resto que llamaremos margen de contribución ayuda a cubrir los gastos fijos. Una vez cubiertos estos genera lo que denominamos beneficio.
Así pues el punto de equilibrio sería aquel nivel de ventas en el cual el margen de contribución total cubre exactamente los gastos fijos.
Gastos fijos | 150.000, -€ |
Precio unitario | 80, -€ |
Coste variable unitario del producto | 60, -€ |
Margen de contribución | 20, -€ |
Veamos el caso de una empresa en la que se dan las siguientes cifras, en la producción y venta de cierto producto:
Luego, margen de contribución en %:
El punto de equilibrio expresado como volumen de ventas se calculará dividiendo los gastos fijos entre el margen porcentual expresado en tanto por uno.
En este caso, 25% ⇒ 0,25
Por tanto, el punto de equilibrio en unidades monetarias = 150.000 / 0,25 = 600.000 €
También podemos expresar el punto de equilibrio en unidades de producto, para ello bastaría con dividir la cifra de gastos fijos entre el margen en €.
Así tendremos:
Punto de equilibrio en unidades = 150.000 / (80-60) = 7.500 Uds
Si a continuación multiplicamos la cifra obtenida de unidades del producto en el punto de equilibrio por el precio de venta unitario, tendremos
7.500 uds x 80 €/ud = 600.000 €
Que es la cifra que inicialmente nos daba el volumen de ventas que deberíamos alcanzar para llegar al punto de equilibrio.