La importancia de la contabilidad no sería tal ni se entendería sin que ésta fuese el reflejo fiel de la realidad de una organización y para ello cobra fuerza el concepto de la imagen fiel.
Si todo aquello que se expresa en las cuentas anuales de una empresa entendidas éstas como el balance de situación, la cuenta de pérdidas y ganancias, el estado de cambios en el patrimonio neto, el estado de flujos de efectivo y la memoria fuese una distorsión de la realidad organizacional, no tendría ningún sentido el conocimiento generado a partir de la interpretación de la información mostrada.
El Plan General Contable español, después de cambios planteados en distintas modificaciones, incluyendo la expuesta en el Real Decreto 1159/2010, de 17 de septiembre, por el que se aprobaron las Normas para la Formulación de Cuentas Anuales Consolidadas y se modificó el Plan General de Contabilidad aprobado por Real Decreto 1514/2007, de 16 de noviembre y el Plan General de Contabilidad de Pequeñas y Medianas Empresas aprobado por Real Decreto 1515/2007, de 16 de noviembre, mantiene la premisa principal de la redacción de las cuentas anuales de manera clara, con una información entendible y comprensible, además de útil para los usuarios ya que así les servirá para tomar decisiones consecuentes con la realidad puesto que han podido observar la situación financiera y los resultados de la empresa, de conformidad con las disposiciones legales.
A este punto es importante destacar que la imagen fiel se consigue, además de teniendo claras las premisas expuestas, con la aplicación de diferentes requisitos, principios y criterios contables conducentes a la ya mencionada imagen de la organización. De hecho, si no fuese suficiente el cumplimiento de los mencionados requisitos, principios y criterios para mostrar la imagen correcta, se habrá de suministrar información suficiente en la memoria de la organización, entendida como complementaria para cumplir con el objetivo básico de la contabilidad.
Determinadas excepcionalidades con respecto al cumplimiento de la imagen fiel que las hagan incompatibles y que deben ser incorporadas a las cuentas anuales, serán consideradas de improcedente aplicación. En estos casos, la motivación de tales hechos en la memoria ha de ser suficiente y la explicación de las excepcionalidades hará hincapié en la afectación de estas sobre el patrimonio, la situación financiera y los resultados de las empresas.
La aplicación en todo momento de la imagen fiel en el trabajo del contable es, por tanto, un elemento esencial para el desarrollo del conocimiento que se obtiene a través de la información contable. A lo anterior hay que incorporar la importancia que esta información tiene no sólo para la contabilidad en sí misma, para los stakeholders de la organización o para la sociedad, si no también para otras ciencias como las finanzas o la propia economía, que se valen, de este conocimiento para establecer modelos, calcular determinados ratios o vislumbrar el próximo escenario micro y macroeconómico.
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