Se entiende por elementos de las cuentas anuales aquellos que, cuando cumplan los criterios de reconocimiento establecidos en los requisitos de la información contable, se registran efectivamente en el balance y son:
Activos: Bienes, derechos y otros recursos controlados por la organización a nivel económico, resultante de sucesos pasados (normalmente en forma de obligaciones), de los que se espera que la organización obtenga beneficios o rendimientos económicos en el futuro.
Pasivos: Obligaciones actuales surgidas como consecuencia de sucesos que tienen lugar en el pasado, para cuya extinción la empresa espera desprenderse de recursos que puedan producir beneficios o rendimientos económicos en el futuro. A estos efectos, se entienden incluidas las provisiones.
Patrimonio neto: Constituye la parte residual de los activos de la empresa, una vez deducidos todos sus pasivos. Incluye las aportaciones realizadas por sus socios o propietarios, que no tengan consideración de pasivos, así como los resultados acumulados u otras variaciones que le afecten.
Es importante destacar a este punto los elementos que se registran en la cuenta de pérdidas y ganancias o, por defecto, en el estado de cambios en el patrimonio neto y que son:
Ingresos: Incrementan el patrimonio neto de la organización durante el ejercicio, ya sea en forma de entradas o aumentos en el valor de los activos, o de disminución de los pasivos, siempre que no tengan su origen en aportaciones, monetarias o no, de los socios o propietarios.
Gastos: Decrementos en el patrimonio neto de la organización durante el ejercicio, ya sea en forma de salidas o disminuciones en el valor de los activos, o de reconocimiento o aumento del valor de los pasivos, siempre que no tengan su origen en distribuciones, monetarias o no, a los socios o propietarios, en su condición de tales.
Los ingresos y gastos del ejercicio se imputarán a la cuenta de pérdidas y ganancias y formarán parte del resultado, excepto cuando proceda su imputación directa al patrimonio neto, en cuyo caso se presentarán en el estado de cambios en el patrimonio neto, de acuerdo con lo previsto en la segunda parte de este Plan General de Contabilidad o en una norma que lo desarrolle.